Las momías Chinchorro (Chile)

Historia Viva
Un inmenso palmar recibe a los visitantes a las instalaciones del MASMA. Junto a la entrada hay un busto de Max Uhle, uno de los primeros investigadores en desentrañar los factores antropológicos del norte chileno.

Además se puede observar una muestra de petroglifos compuesto por 13 bloques de piedras, algunos de ellos con más de una cara tallada, que muestran diversas escenas con motivos antropomorfos, zoomorfos y geométricos.

Trasladados desde la zona de San Lorenzo y el cementerio de Sobraya, datan del 800 -1200 DC y fueron salvados de los avatares de la modernidad. Las nuevas construcciones, los "guaqueros" o ladrones de yacimientos arqueológicos y la climatología, han provocado una importante disminución del gran tesoro patrimonial de este lugar.

Desde su fundación en la década de los 60´, el museo se ha convertido en el sinónimo de la historia viva que comprende la región más septentrional de Chile. Un refugio que enlaza a los arcaicos habitantes costeros de Arica con los actuales, revelando una cercanía que trasciende los miles de años de diferencia.


Los Chinchorro;


Una vez dentro del museo y cancelada su entrada ($1000 adultos, $500 niños y Tercera edad), tras la primera puerta una serie de 18 vitrinas, cada una con varias piezas arqueológicas expuestas y gráficos recreacionales que se complementan con un conjunto de información escrita dispuesta en un panel, conforman la muestra "Arica Pre Hispánica".

Durante el recorrido se pueden ver evidencias físicas y culturales de los antiguos pobladores de la región. En la primera parte hay evidencias de hace 8 mil años AC a los 6 mil años AC: instrumentos de madera, hueso y piedra, en su mayoría.

Además hay indicaciones acerca de la historia del poblamiento litoral de Arica, quiénes moraban en cuevas con vista al mar y que encontraban su alimentación principal en moluscos y animales costeros.





Según los científicos todo el proceso de momificación correspondería a una amplia cosmovisión respecto al significado de la vida y de la muerte que fue manejada por los Chinchorro. Los primeros hallazgos fueron evidenciados por Max Uhle en los años cercanos a 1920. Desde entonces una serie de estudios buscaron la edad de las momias, llegando Bente Bittmann y Juan Munizaga en 1976 a señalar que se trataban de las más antiguas del mundo. Mucho más viejas que las de Egipto, principal referente en comparación.

Comentarios